Todos sabemos que vivir en un entorno cercano a la naturaleza mejora los aspectos esenciales de la salud física y mental: los ejemplos más visibles son la estabilización de la tensión y la reducción del estrés. Los mismos beneficios están asociados incluso a aquellas personas que tienen objetos decorativos de madera, un material que proviene directamente de la naturaleza. Para aquellos que eligen una casa íntegramente de madera (un material biológico que proviene de la naturaleza, y muy ecológico que no daña la naturaleza), los beneficios aumentan exponencialmente. Un estudio reciente ha demostrado que la madera tiene un impacto significativo en los siguientes aspectos del bienestar:
Todos sabemos que vivir en un entorno cercano a la naturaleza mejora los aspectos esenciales de la salud física y mental: los ejemplos más visibles son la estabilización de la tensión y la reducción del estrés. Los mismos beneficios están asociados incluso a aquellas personas que tienen objetos decorativos de madera, un material que proviene directamente de la naturaleza. Para aquellos que eligen una casa íntegramente de madera (un material biológico que proviene de la naturaleza, y muy ecológico que no daña la naturaleza), los beneficios aumentan exponencialmente. Un estudio reciente ha demostrado que la madera tiene un impacto significativo en los siguientes aspectos del bienestar:
¿Por qué elegir la madera?
Una opción más saludable que el hormigón
Gracias a estos beneficios, se ha constatado un incremento de la inversión en la utilización de la madera como material de construcción para las escuelas, las oficinas y los hospitales.
Resistencia. Fácil de montar. Eficiencia energética.
Si planeas construir una vivienda o un edificio con una función diferente, pero espaciosa, encontrarás en adelante los argumentos que te convencerán de darle una oportunidad a la madera.
Un material que no daña el medio ambiente
Aunque parezca difícil de creer, una casa de madera deja una huella sobre el medio ambiente notablemente menor que los materiales de construcción alternativos. Las diferencias se notan fácilmente en términos de emisiones de carbono, impactos en la calidad del agua y todo el impacto ambiental, si los medimos a lo largo de todo el ciclo de vida del material.
Uno de los estudios recientes en la materia muestra que las emisiones durante todo el ciclo de vida de una casa de madera son un 31% más bajas que las de una casa de hormigón y un 26 % más bajas que una casa de acero, justo antes de medir el carbono en la madera (que se habría sido liberado en el medio ambiente al mismo tiempo que el final del ciclo de vida de la madera en la naturaleza). Otro estudio mide la energía requerida para construir casas de madera a 80 megajulios en la viga de madera, donde una viga de acero requiere 516 megajulios y una de hormigón 290 megajulios. También se debe mencionar aquí que las emisiones de carbono son de 4 kg para la madera, 40 kg para el acero y 27 kg para el hormigón.